La crisis económica causada por la pandemia de COVID-19 se ha presentado de muchas formas a nivel mundial, pero siendo mucho más marcada en aquellas empresas donde de bienes no esenciales, uno de esos casos es Inditex, que actualmente mantiene cerradas el 88% de sus tiendas, representando un 44% en la caída de las ventas.

Es necesario indicar que la firma empresarial presidida por Pablo Isla mantiene como punta de lanza a importantes tiendas como Zara, Bershka y Pull & Bear, cuyas estrategias comerciales las han posicionado de forma exitosa a nivel mundial.

A pesar de disponer de un importante porcentaje de locales cerrados, la caída de las ventas pudiese ser mucho peor. Sin embargo, se tomaron acciones a tiempo, donde Inditex se fortaleció digitalmente, lo que potencio sus ventas via web hasta un 50% en un solo trimestre, teniendo el mes de abril un repunte de hasta un 95% con respecto al año anterior, donde no existía la crisis.

Actualmente la firma mantiene su firme estrategia de posicionamiento mediante el comercio electrónico, aspirando una inversión de 1.000 millones de euros para su esquema en línea y 1.700 millones para la integración del sistema físico y el online.

Una afirmación de importancia se ha dado como Inditex asegura que a pesar de disponer de un gran porcentaje de sus ventas en formato online, las plantillas de trabajadores se mantendrán, pudiendo realizar cambios únicamente en el cubrimiento de las nuevas necesidades marcadas por la integración de sus tiendas con las plataformas digitales.

Actualmente se puede indicar el margen bruto de ganancias ha sido estable, manteniéndose 58.4 % de las ventas, afirmando como la estrategia ha sido bien llevada y ajustándose a los complejos tiempos de pandemia. Habrá que esperar, pero se vislumbra mejoras considerables, incluso con respecto a periodos pasados, en donde no existía una crisis marcada como la actual.