Bruselas quiere «evitar» que el ‘efecto Trump’ se extienda a Alemania, Italia y Francia

La victoria de Donald Trump ha encendido las alarmas en la Comisión Europea ante el temor de que se produzca el mismo efecto en favor de los populistas en las elecciones que van a tener lugar en menos de un año en cinco países clave. «Hay que evitar que la próxima catástrofe sea en Italia, Francia, Alemania o en cualquier otro país», asegura el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, ante periodistas de los principales periódicos europeos, entre ellos EL MUNDO.
«Las elecciones en EEUU son un toque de atención, uno más. Tenemos que aprender rápido la lección. Mucha gente piensa que está cargando con una parte injusta de la crisis y la desigualdad tienen que volver a ser máxima prioridad a todos los niveles, también en los estados miembros», afirma este ex ministro socialista francés.
«Si no somos capaces de responder adecuadamente, vamos a sufrir, estamos sufriendo ya esta distancia entre la élite y la gente, entre los gobernante a todos los niveles y los ciudadanos», dice Moscovici, que no concreta cómo, más allá de poner como ejemplo que en los tratados comerciales internacionales «hay que tener también en cuenta a los perjudicados» por el proceso de liberalización. También habla de «reformas estructurales de segunda generación» ya no tan centradas en la austeridad. Moscovici que mantiene la presión sobre países como España, reitera que es necesario el saneamiento presupuestario, pero dice asumir que también lo es «la cohesión social». Defiende que las economías europeas continúen «abiertas a la globalización» y resalta «la fortaleza económica» entre los valores del modelo europeo. Pero añade que hay que diseñar ahora las reformas y la política económica «dando respuesta a los auténticos retos» que abre la victoria de Trump.
Aunque resuelta, por ahora, la incertidumbre en España con el Gobierno en minoría de Rajoy, el equipo de Moscovici prevé un crecimiento «modesto» en la Eurozona apenas superior al 1,5% en los próximos dos años y eso sin calcular el posible efecto Trump que llene de incertidumbre el proyecto europeo. Tras su victoria, el calendario inmediato de elecciones en cinco países clave ha encendido las alarmas en el cuartel general de la Comisión Europea.
Italia
El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ha afirmado que dimitirá si el próximo 4 de diciembre pierde el referéndum sobre su programa de reformas y las encuestas no le son favorables hasta ahora. El ascenso del movimiento populista Cinco Estrellas de Beppe Grillo llenaría de inestabilidad la tercera economía del euro, que crecerá apenas un 0,7% este año. En Bruselas existe fuerte decepción con los incumplimientos de Renzi en materia de déficit, pero no aumentará la presión hasta después del referéndum para no complicar aún más el problema.
Austria
También celebra elecciones en el mismo día que Italia para designar en este caso al presidente de la república. Aunque es una economía menos relevante para la Eurozona, preocupa que pueda convertirse en jefe del Estado un líder de extrema derecha.
Holanda
En marzo celebra elecciones y el actual primer ministro, el liberal Mark Rutte, pugna codo con codo en las encuestas con el ultraderechista llamado Partido de la Libertad, que pretende la salida de su país del euro imitando a Reino Unido. Una victoria de este último multiplicaría la impresión en los mercados de que el Brexit no es un final, sino el principio de una cascada de salidas, lo que sería muy perjudicial para la deuda de países como España.
Francia
En abril y mayo se disputa la Presidencia de la República con la ultraderechista Le Pen en ascenso, crecida tras la victoria de Trump y partidaria de acabar con el BCE y la salida del euro. Moscovici no comenta las elecciones francesas más allá de que espera que surja «un gobierno capaz de emprender las reformas necesarias con actitud proeuropea». Francia crecerá este año a un ritmo de apenas el 1,3% y sólo llegará al 1,7% en 2018 si no se produce la catástrofe Le Pen, según los cálculos de la Dirección General de Asuntos Económicos de la Comisión.
Alemania
Por si fuera poca inestabilidad, los alemanes elegirán en septiembre si continúa la canciller, Angela Merkel -aunque aún no ha confirmado su candidatura- o dan un varapalo a los partidos tradicionales que gobiernan en coalición. La ultraderecha también se encuentra en ascenso. «El populismo demagógico no solo existe en EEUU», escribió ayer en el diario Bild, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble.
Fuente.ElMundo