Amnistía Internacional: FIFA ignora abusos contra inmigrantes que construyen para Qatar 2022
Prem es un trabajador de la industria metalúrgica y padre de tres hijos. Es originario de Nepal y trabajó en el Estadio Internacional Khalifa en Doha de febrero a mayo de 2015.
Este trabajador inmigrante se rompía la espalda de sol a sol para construir los brillantes estadios de fútbol de Qatar que serán sede de la Copa del Mundo de la FIFA en 2022.
Prem perdió su casa pues no pagó arriendo durante esos tres meses pues no recibió salario, según denunció la organización Amnistía Internacional (AI).
Él es uno de los muchos ejemplos de una explotación de trabajadores inmigrantes en Qatar, sede de la justa mundialista de 2022 organizada por la FIFA. Esta situación ya no puede ser ignorada por el organismo que gobierna el futbol profesional, dijo AI en un nuevo reporte publicado este jueves.
Amnistía asegura que encontró evidencia de “abusos sistemáticos” incluyendo trabajos forzados de inmigrantes en el Estadio Khalifa.
“Si el sistema en Qatar no cambia, entonces cada hombre, mujer y niño que vaya a la Copa del Mundo encontrará a un trabajador inmigrante que fue explotado”, aseguró Audrey Gaughran, el director de investigación y temas globales de Amnistía, en una entrevista con CNN.
El lado feo de un juego hermoso
El reporte de Amnistía Internacional, de 80 páginas, titulado: El lado feo de un juego hermoso: trabajo y explotación en Qatar, sede de la Copa del Mundo, se basó en entrevistas realizadas desde 2015 y hasta febrero de 2016, a 234 trabajadores inmigrantes que realizaron labores de construcción en el Estadio Khalifa o en el Complejo Aspire Zone, donde han entrenado clubes europeos de alto nivel como el Bayern Munich de Alemania, el Manchester United de Inglaterra y el Paris Saint-Germain francés.
Los abusos encontrados incluyen: vivir en “hacinamiento”, empleadores confiscando los pasaportes de los trabajadores; personas amenazadas por quejarse de las condiciones laborales; trabajadores teniendo que pagar hasta 4.300 dólares a reclutadores en sus países de origen para obtener un empleo en Qatar, así como otros que no recibieron pagos por meses.
Sin embargo, Qatar dijo que “el tono de las últimas declaraciones de Amnistía Internacional reflejan un panorama erróneo”.
“Siempre hemos mantenido a esta Copa del Mundo como un catalizador de cambio, que no será construido en la espalda de trabajadores explotados”, dijo el Comité Supremo del Legado del reinado del golfo en un comunicado enviado a CNN. “Rechazamos la idea de que Qatar no sea una nación adecuada para realizar la Copa del Mundo”.
“La investigación de Amnistía Internacional estuvo limitada a cuatro compañías de las más de 40 que están trabajando en el Estadio Internacional Khalifa. Las condiciones reportadas no representan el trabajo que se lleva a cabo en dicho sitio”, dijeron las autoridades de Qatar.
“Muchos de los temas de los que se habla ya fueron atendidos en junio de 2015, meses antes de que se llevara a cabo el reporte de Amnistía”, agregaron las autoridades de Qatar.
Una pesadilla viviente
La Copa del Mundo de la FIFA es el evento deportivo más visto en el mundo, generando más de 5,000 millones de dólares en pagos por derechos de transmisión y contratos publicitarios.
Desde que ganó la sede en 2010, Qatar está gastando unos 200,000 millones de dólares ―mucho más que cualquier otra sede mundialista― en infraestructura, nueve estadios con aire acondicionado y remodelaciones mayores en tres de ellos, incluyendo al estadio Khalifa, con capacidad para 40,000 espectadores.
“El abuso de los trabajadores inmigrantes es una mancha en la conciencia del mundo del futbol”, dijo el secretario general de Amnistía Internacional en un comunicado de prensa de la organización.
“Para los jugadores y fanáticos, un estudio de la Copa del Mundo es un lugar de sueños. Para algunos de estos trabajadores que hablaron con nosotros, se siente como una pesadilla viviente”, agregó Shetty.
Tanto la FIFA como los patrocinadores deberían impulsar un cambio, o de lo contrario caerían en el riesgo de ser partícipes por “asociación”, advirtió Amnistía.
fuente.cnn